Ojos tristes después de blefaroplastia: causas, soluciones y qué hacer

En nuestra clínica de medicina estética, Leben &Körper, somos conscientes de lo que supone someterse a una cirugía estética de párpados: la ilusión de rejuvenecer la mirada y recuperar vitalidad puede verse empañada si, al cabo de semanas o meses, la expresión se convierte en lo que llamamos “ojos tristes después de la blefaroplastia”. En este artículo comentamos desde las causas por las que se da hasta las soluciones que existen para tratarlo. 

Si te encuentras en esta situación, queremos ayudarte: desde nuestra experiencia clínica te explicamos por qué puede ocurrir, cómo prevenirlo y qué alternativas de solución existen. Si lo deseas, puedes solicitar una consulta personalizada hoy mismo para valorar tu caso. ¡Sigue leyendo para saber más!

¿Qué entendemos por “ojos tristes después de blefaroplastia”?

La expresión “ojos tristes” describe una mirada que transmite cansancio, descolgamiento o flacidez en el párpado superior o inferior, lo que puede dar sensación de tristeza o pérdida de vitalidad. Aunque la cirugía de párpados (Blefaroplastia) se realiza para rejuvenecer la mirada, en ciertos casos los resultados pueden generar una estética no deseada o temporalmente diferente. Estudios y artículos especializados señalan que dicha apariencia puede deberse a varios factores, incluso cuando la cirugía ha sido técnicamente correcta.

En nuestra clínica hemos tratado pacientes que, pasadas las primeras semanas, no se reconocen en el espejo: “Pensaba que me vería despierta y me veo como si estuviese medio dormida”, comenta una de ellas. Comprender qué hay detrás de ese cambio es el primer paso para restaurar una mirada que refleje bienestar.

Principales causas de los ojos tristes después de una blefaroplastia

Usualmente clientes que vienen a nuestra clínica a revertir los ojos tristes por la Blefaroplastia nos consultan cuáles son  las razones por las que puede aparecer esta apariencia tras la intervención. A continuación te las detallamos:

• Eliminación excesiva de piel o grasa. Retirar demasiado tejido puede hacer que el tejido palpebral pierda volumen, la superficie se hunda o se reseque, dando sensación de párpado más caído.
• Alteración del músculo orbicular o estructura palpebral. Si el músculo que rodea el párpado se ve afectado, el cierre, la apertura o la forma pueden alterarse, cambiando la expresión.
• Cicatrización inadecuada o retracción palpebral. La cicatrización puede “tirar” del párpado, creando asimetría o mirada hundida.
• Posicionamiento incorrecto del párpado inferior o caída de la ceja. Puede generar un efecto de mirada más “triste” o envejecida.
  

Es importante destacar que, en muchos casos, esta apariencia puede ser transitoria mientras el paciente cicatriza y los tejidos se adaptan. Lo que diferencia un proceso normal de uno que requiere intervención es la persistencia de la apariencia y la funcionalidad ocular.

Cómo prevenir la aparición de una mirada triste tras la cirugía

Desde nuestro equipo recomendamos los siguientes puntos para minimizar el riesgo y asegurar un resultado natural y armónico:

• Lo más importante: ¡Elegir un cirujano con experiencia en cirugía palpebral y una buena reputación!
• Tener expectativas realistas y un diálogo abierto sobre tus objetivos y riesgos.
• Seguir al pie de la letra las indicaciones postquirúrgicas: reposo, posición elevada, evitar esfuerzo físico, etc.
• Mantener revisiones periódicas para comprobar el proceso de cicatrización.
  

En nuestra práctica, hemos observado que los pacientes que realizan correctamente los cuidados postoperatorios tienen menor incidencia de alteraciones estéticas indeseadas.

Soluciones disponibles en Leben & Körper

Si ya has pasado por la cirugía y observas que tu expresión no es la esperada, en Leben & Körper te ofrecemos opciones para corregir o mejorar la situación:

1. Valoración médica exhaustiva para identificar la causa: volumen perdido, cicatrización, caída de la ceja, etc
2. Tratamientos no quirúrgicos complementarios, por ejemplo rellenos de volumen, toxina botulínica para ajuste de cejas o párpados, radiofrecuencia para reafirmar piel.
3. Cirugía de revisión cuando sea necesaria: corrección de volumen, posición del párpado inferior, cantopexia, etc. 

Un ejemplo real

Ana, 45 años, acudió a nuestra clínica 8 meses después de su blefaroplastia porque sentía que su mirada “se veía apagada”. Tras un diagnóstico personalizado y un plan confeccionado para ella, realizamos combinación de relleno de grasa autóloga en pómulos, toxina para elevación leve de la ceja y radiofrecuencia para reafirmar la piel. El resultado: una mirada más abierta, expresión rejuvenecida y mayor satisfacción personal.

¿Cuándo preocuparse y cuándo dar tiempo?

Si tras 6‑12 meses la expresión no se corrige o cambia tu funcionalidad palpebral, es momento de valorar la revisión.

Tabla de tiempo estándar para asistir al médico tras  ojos tristes después de blefaroplastia

Una mirada joven en manos de expertos

Para conocer más sobre tratamientos complementarios de rejuvenecimiento facial, te invitamos a leer nuestro artículo sobre tratamiento facial Indiba, una técnica que combinamos frecuentemente con la blefaroplastia de revisión.

Da el paso hacia una mirada que realmente refleje lo que sientes por dentro.  Nuestro equipo estará encantado de atenderte, analizar tu caso y proponerte la mejor solución para recuperar una mirada natural, descansada y en armonía con tu rostro. ¡Reserva tu cita ahora y deja en nuestras manos una mirada que transmita vitalidad!